viernes, 28 de noviembre de 2014

MIEDO A VOLAR



MIEDO A VOLAR.



(Dedicado a BBB)







Muchas personas presentan este tipo de ansiedad, y a pesar del aumento de la seguridad aérea ha incrementado  las fronteras del vuelo seguro, el hecho de ser animales no voladores hace que haya siempre, alguna reserva moderada por temores normales a la actividad de vuelo.
                El aumento de seguridad aérea ha sido acompañado por el aumento del temor a incidentes no relacionados con la aviación, como lo es el terrorismo en aviones y aeropuertos, que ha ocasionado un aumento de actividades estresantes antes del vuelo y condiciones de pérdida de sueño y tensiones por el manejo del equipaje. Esto aumenta la potencialidad de los síntomas de este temor.
                Entonces, una persona con esta ansiedad se somete a una mayor por el proceso de seguridad policial. Puede tener miedo a las alturas, tener miedo a caer en el mar o en agua, o el atávico miedo a la oscuridad que tenemos todos al nacer y vamos dominando poco a poco´.
                Es importante saber que la seguridad de los equipos es muy alta, sin embrago, siempre hay un pequeño margen de riesgo,  donde los errores humanos se amplifican por circunstancias ambientales no previstas, por lo que la probabilidad sea muy baja, o ínfima, la posibilidad seguirá existiendo, pero en nuestro caso que es Venezuela hay infinidad de actividades donde la posibilidad y probabilidad de sufrir un accidente, son exponencialmente más altas que sufrirlo en un avión.
                Los accidentes de Air France en el Atlántico sur y el de Indonesia Airline, han llevado a incrementar la vigilancia y el seguimiento de vuelos  en zonas donde la posibilidad de accidentes era baja, por, no pasar por dicho lugar, aerovías importantes.
                De cualquier manera, existen procedimientos estándar para amarizajes, para vuelo sin visibilidad, para prevenir y corregir descompresiones explosivas a gran altura y equipos para aliviar esas condiciones.
            La pérdida de control sobre uno mismo, al someterse a los procedimientos aeroportuarios crea ansiedad también, pero son tantos los pasajeros y los vuelos en esta época, que ese mismo manejo, está diseñado para ser lo más rápido y seguro posible.
            Cerca de 18% de las personas adultas sufren este tipo de ansiedad.
            Las personas que sufren esta condición, tratan de evitar volar. Pero en esta era moderna es casi imposible.
            Los síntomas son apretar las manos hasta que los nudillos se ponen blancos por la reducción de circulación, taquicardia, sudor excesivo, ritmo respiratorio alto a veces hasta hiperventilar y nauseas. Los síntomas agravan la situación.
            Una de las formas de reducir la ansiedad es saber al máximo de las condiciones de vuelo, del modelo de avión, de su record de seguridad y buscar tener cierto nivel de control sobre sí mismo, es decir, si puede escoger su asiento, haga la elección basada en su temor más acuciante. Si teme un amarizaje, siéntese próximo a las salidas del avión que tienen los toboganes de evacuación. Si tiene miedo a la oscuridad, busque sentarse cerca de las zonas donde la iluminación es constante, cerca de donde trabaja la tripulación. Si teme a las alturas, no se siente cerca de una de las ventanillas, si teme la claustrofobia, entonces, busque las ventanillas.
            Si no puede escoger el asiento, haga un plan de cómo llegar al lugar de menor ansiedad en caso de un incidente. De cómo llegar más rápido.
            Puede llevar una pequeña linterna o algún amuleto que le sirva como disipador de estrés.
            El nivel de seguridad estadístico de la aviación de transporte moderna hacen aceptable, el tomar ansiolíticos recetados por un doctor, y dormir el máximo trayecto, el problema de esto, es que sí se presenta una situación real, sus reacciones no van a ser las óptimas para proceder por su propia supervivencia, lo mejor es usar técnicas de respiración para mantener la calma, disipar el miedo y pensar rápido y decidir bien.
            Si usted considera que su ansiedad y miedo a volar es un problema para su trabajo o modo de vida, el reconocerlo es el primer paso. Existen numerosos programas de autoayuda y en casos más graves, tratamiento psicológico de terapias de exposición, donde las personas aprenden a cómo controlar sus propios miedos y temores. Estos dan muy buenos resultados. Existen programas como el  SOAR fear of flying program, y si tiene un teléfono inteligente puede descargas como esta: Get the free SOAR app for your mobile phone or tablet

                También es una gran herramienta tener en su Tablet o teléfono inteligente, las películas que desee ver y los juegos que le sirvan para divertirse y entretenerse mientras dura el vuelo y recordar que ud. Tiene suerte y va en un avión a un lugar donde otras personas cuerdas y sanas quisieran estar en su lugar.
                Muchos aviones tienen la opción de ver la ruta y las condiciones de vuelo y puede ver cuánto le falta y acudir al personal de cabina que está para asistirlo. Tenerle miedo al miedo es lo peor y este no vive en el fuselaje sino dentro de su propio ser y en de los otros pasajeros, busque dominar ese temor y desarrolle alguna resistencia a no contagiarse del miedo de otros, eso en el peor de los casos, puede salvarlo en una poco probable pero posible accidente y disfrutar una de las ventajas más grandes de la tecnología que puede y debe ser, muy placentera.
                ¡Qué tenga un buen vuelo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!





Martín Lon Blanco.

Caracas, 27 de noviembre de 2014.

No hay comentarios:

Publicar un comentario