domingo, 7 de diciembre de 2014

La cólera rabiosa en los tiempos del amor.

TERCERA DE TREINTAY CUATREROS.


Nietzche, en su afán de explicar todo lo humano estableció un cuadro donde se podían ver las pulsiones contrapuestas que hacen la historia.
En resumen, el Eros o el amor se opone al Tánatos o la muerte. Lo dionisíaco, que engloba la vida, el instinto, la fuerza vital, el placer y la voluntad de poder, su dios es Dioniso. Lo apolineo, la razón, el arte, los ideales. Su dios es Apolo. Todos se relacionan a través de Hermes, tanto en convergencia como en divergencia, Eros es Afrodita y Tánatos es la muerte natural, gémela de hipnos, el sueño.
Es increíble como las personaas nos referimos a esto sin darnos cuenta. Nos conseguimos con un viejo compañero o amigo y la conversación, pasa por esas cuatro esquinas:
¡Qué bien te ves!
¿Cómo están tus amores?
¡Este gobierno ha perdido la razón, mira como está el dólar y dígame las cárceles!
¿A qué no sabes quien se murió?
Lo apolineo, lo dionisíaco, Eros y Tánatos, no importa el orden.
Lo cierto es que las cuatros posiciones son válidas e importantes. Claro que hay matices y circunstancias, la esfera individual es más dionisíaca, cuando esto no es así, aumentan los neuróticos en la sociedad, pero igual, grupalmente, lo apolineo debe imperar, ya que en las relaciones grupales o comunitarias, donde la ley y las costumbres deben ordenar y jerarquizar las apetencias de cada quien, para evitar la muerte, la violencia y las enfermedades, es decir, para alejarse o retardar el Tánatos y las Keres y que el Eros o el amor, tanto individual como grupal, tanto el físico como espiritual, sean productivos y nutricios.
Había una vez un treintaycuatrero que trabajaba en la línea de vuelo, como jefe de máquina. Era soltero pero estaba obsesionado con una maracayera que lo llevaba por la calle de la amargura y que ignoraba sus requiebros y solicitudes, tanto por la decencia social y religiosa como por la ley de las costumbres y la experiencia que se impone en las ciudades donde prevalecen las bases y cuarteles militares, donde los civiles aprenden que “crecer y multiplicaos”, es un pensamiento incompleto, porque debiera ser “crecer y multiplicaos y no escapaos después”.
Lo cierto era que el sargento menguaba en lo físico y fallaba en lo técnico y el jefe de la línea de vuelo, le informó al maestro más antiguo, quien lo envió donde el capellán y el psiquiatra, pero sin resultados, por lo que decidió que “tenía que hacer algo”.
Tener que hacer algo”, se llama hoy en día “búsqueda problemática”, en las ciencias gerenciales y ha demostrado a lo largo del tiempo, dar resultados malos o negativos, o por lo menos peores que los que que arrojaría un sistema más apolineo o razonable.
El Maestro llamó al sargento y le dijo:
-Mire nuevo, yo tengo guardia en operaciones de base este sábado. Tengo segundo turno. Usted se me presenta allá con la novia y dos testigos y yo lo caso y ya. Después vamos a ver que hace usted para arreglar su problema. Así que nos uniformamos de gala y procedemos.
El sargento, en su desesperación, le pareció esta mala opción, muy atractiva, a falta de cualquier otra. Trabajó como nunca, informó a su novia y a la familia de su novia, sin decirle por supuesto que estaba comprometido en su pueblo. La desesperación “priapística” siempre es mala consejera.
Así, llegó el a la vez, aciago y esperado día y después de las doce de la noche llegaron a Operaciones de Base en “Libertador”, Palo Negro, la familia de la novia y esta, muy elegantes y el sargento y el maestro treintycuatrero de gala. El maestro se aseguró antes de recibirles de: “les cuento tres y no los veo” a los soldados recorridas e imaginarias que hacían sus turnos.
Y procedió con toda la pompa y boato aprendidas a lo largo de su carrera, pero esto hizo sospechar a unos familiares de la novia y el maestro los conminó:
-Miren, ustedes no han visto ni siquiera una película donde el capitán de un barco case a una pareja. Al sargento lo tengo que enviar a una misión donde corre en riesgo su vida, por eso estoy cumpliendo este deber. Bueno, esto es una base aérea y es igual. Aquí el capitán soy yo y además de eso, ¡Yo soy “AUTÓCTONO” EN MI JURISDICCIÓN!!!!!!!!
Términó la ceremonía y el maestro se disculpó diciendo que ya habría tiempo para brindis y celebraciones también y que procedieran a abandonar la base. Los familiares se volvieron a quejar de que en todos los matrimonios que habían presenciado, siempre se firmaba un acta y se les daba una copia, a lo que el maestro les dijo que no había problema, que el la levantaba de inmediato para que la firmaran, cosa que hizo, asentando lo ocurrido en el “LIBRO DE RONDA MAYOR”, el cual, es de folios numerados y allí en la página 113 (para decir un número), firmaron todos. Y en paz, se retiraron.
Pero ¡¡¡¡Ahhh!!!!!!!!!!, que problema con la vanidad humana y sus veleidosos caprichos.
Una vez realizada la coyunda, o el intercambio pasional de fluídos corporales o como prefieran llamarlo, a nuestro personaje el sargento le ocurrió lo mismo que a Amnón, primogénito del rey David después de violar a su hermanastra Tamar, a quien no soportaba después de haberla poseido, habiendo estado antes, obsesionado hasta la locura por ella.
Por lo menos nuestro treinticuatrero no tuvo, una relación incestuosa. Pero al desaparecerse y no regresar donde su su víctima, la familia fue a la Base a reclamar y su comandante llamó al Comandante del 34 y le dijo lo que había pasado y no le fue difícil dar con el maestro ya que después de oír a los familiares y escuchar lo de “Autóctono” en lugar de “Autónomo” en su jurisdicción, supo quién era, ya que este personje era muy dado a usar términos que oía en la radio o TV sin asegurarse de que significaban y eso era usual en él y de conocimiento general.
Al interrogarlos, ambos exigieron que eso se lo tenían que demostrar porque el comandante de la base estaba cansado de los problemas con los treintaycuatreros y el comandante del 34 estaba cansado de eso mismo y del comandante de la base, por lo que los amenazaron con juicio, cárcel y expulsión con media vuelta. Pero el Libro de Ronda Mayor no aparecía.
Después de algunos días, los de inteligencia encontraron el libro y por supuesto, faltaba la PÁGINA 113. Por lo que se les suspendió el arresto preventivo para pasarlos a los tribunales. Pero como suele suceder en esta TIERRA DE GRACIA, la novia y sus familiares se compadecieron de los dos faltones y de sus carreras y fueron a interceder por ellos con el comandante de la base y del escuadrón.
En dicha reunión, al saber que los familiares ni la agraviada iban a sostener ninguna acusación, los oficiales, le hicieron saber que de todas formas la sanción militar por ella misma era de una severidad tal, que ni que ellos los perdonaran, les iban a salvar la carrera, porque no iban ascender más nunca.
Para darles una lección, los metieron en el calabozo lo máximo que permitían los reglamentos y les pidieron que solicitaran la baja porque nunca iban a escender, a los que ambos ripostaron que eso no les importaba a menos que los cambiaran del Escuadrón 34.
Bueno, ni el sargento ni la novia eran Romeo y Julieta, ni yo Shakespeare, así que tengo que dejarle a cada quien que lea este escrito que juzgue por sí mismo y sea el dios de su elección:
¿Los juzgará como Afrodita?
¿Los juzgará como Apolo?
¿Los juzgará como Hades?
¿Los juzgará como Dionisos?
Lo único que yo pudiese agregar en su descargo es que en los mismos versos homéricos está muy claro dónde y cuando se puede mentir y porqué. “En la guerra y en el amor, porque en ambos, al final todas las mentiras se descubren”.
A los que se interesen por la pobre Tamar y el vil Amnón, en su tiempo libre pueden revisar el libro de Samuel.
Total, como seres pensantes y responsables son autónomos en su decisión y en sus juicios y a lo mejor, por qué no, también pueden ser por un instante: “autóctonos en su jurisdicción”.



Martín Lon Blanco.
Caracas, 7 de diciembre de 2014.


2 comentarios:

  1. Humoristico e inteligente....una clase amable de la mitologia aplicada a la vida...felicitaciones.

    ResponderEliminar
  2. Excelente anécdota de las locuras de nuestra FAV

    ResponderEliminar